Día 8


Si no te hubiera conocido
hubieran muerto de inanición
los pájaros de mi cabeza.
Si no hubiera vivido contigo
no tendría el corazón repleto de parches de bragas ajenas,
no tendría zarpazos en la memoria;
pero tampoco hubiera vivido.
La vida es dolorosamente jodida
para andar tirando amores
como ceniceros por la ventanilla del coche,
y sigo conduciendo sin carnet
escuchando Dean Martin
por la Toscana de tus caderas.
Desafiando al amor
desafiando a la vida.
Se te está llenando el pasaporte de pensamientos míos.

Comentarios

Entradas populares